miércoles, 15 de agosto de 2012

Vida

Dime, como has llenado este vacío que dejó un antiguo amor en naufragio.
Dime, como llenas de deseo este pecho apagado y lo vuelves tan fresco y erizado como el fruto mas jugoso, que en tus labios jamas hayan estado.
Tus besos, tus ojos tan profundos, me dejan engañarme en el mas hondo gemido, en el mas profundo sentido del verte, amarte..
Amar desde día hasta en las horas muertas en las que nos separan las conciencias.
Dejarnos balancear en los cuerpos soñadores, haciendo prisioneros de nuestros carnales deseos... tu, eres la llave a la imaginación ausente, eres quien devuelves todo al cauce de estas letras.